7 de junio 2015

De Laurence Freeman OSB, “Perdón y Compasión”, ASPECTOS DEL AMOR (London: Arthur James, 1977), págs. 72-74

La única forma de manejar la complejidad de las relaciones humanas es la sencillez del amor. En el amor no juzgamos, no competimos; aceptamos, reverenciamos, y aprendamos compasión. Al aprender a amar a otros liberamos la alegría interna de ser que radia hacia afuera a través de nosotros, tocando a otros a través de las relaciones humanas. Es por esto que las comunidades, familias, y matrimonios no existen exclusivamente para la perfección de aquellos involucrados en la relación. Existen también para irradiar amor… más allá de sí mismos, irradiando alegría, esa sencillez del amor más allá de si mismos, para tocar a todos aquellos que entran en contacto con ellos..(…) Aprendiendo a amar a otros llegamos a un nuevo descubrimiento sobre la unidad de la creación y la sencillez básica de la vida. Vemos lo que significa decir que el amor cubre una multitud de pecados. El perdón es el poder más revolucionario y transformador de que somos capaces. Nos enseña que el amor es la dinámica esencial de cualquier relación, la más íntima, la más antagónica y la más casual. Es lo ordinario de nuestra meditación diaria lo que nos revela que tan universal es el camino del amor.

Después de la Meditación: un extracto de “The Showings: Lady Julian of Norwich, 1342-1415” por Denise Levertov en THE STREAM AND THE SAPPHIRE: Selected Poems on Religious Themes (New York: New Directions, 1997), pág. 58

Ella vivía en tiempos oscuros, como nosotros también:

Guerra, y la Muerte Negra, hambre, conflictos,

Tortura, masacres. Ella sabía

Todo esto, lo sentía

con tristeza, con pena,

conmovido como los hombres

agitan un trapo en el viento.

Pero Julián, Julián….

Volteo hacia ti:

Te aferras a la alegría aunque lágrimas y sudor

Ruedan por tus mejillas como la sangre

Que viste gotear incontables

como la lluvia del alero:

agarrado como un acróbata, de los dientes, ferozmente,

a un alambre delgado como el de una telaraña, tu certidumbre

de compasión infinita, atestiguó con tus propios ojos, con mirada hacia afuera

en tu cuarto pequeño, con la mirada hacia adentro

en tu espíritu ilimitado—

conocimiento que anhelamos compartir:

El Amor era su significado.

Traducción: Guillermo Lagos