Visita del P. Laurence a Venezuela, julio 2015

Con gran alegría y entusiasmo la Comunidad Mundial de Meditación Cristiana de Venezuela,  recibió en Caracas del 15 al 19 de julio 2015 por sexta vez al Padre Laurence Freeman OSB. Sigue leyendo.


El padre Laurence luego de una cena de bienvenida brindada por el grupo coordinador y líderes de grupo, el día 16 durante la mañana visitó el colegio Luis Maria Olaso de la comunidad Fe y Alegría en el sector Popular de la Vega, donde conversó con más de 80 maestros y promotores sobre la meditación como medio para reducir la violencia, partiendo de los maestros y niños y niñas de las escuelas.
La enseñanza de la Meditación formará parte del proyecto de paz promovido por la parroquia Nuestra Sra. Del Carmen de la Vega.

A continuación ofreció la conferencia "El arte de Orar en un mundo estresado" en el Instituto del Profesor de la Universidad Central de Venezuela y en la noche en el Instituto Teológico de Estudios Religiosos (ITER) dio otra conferencia titulada: "Felicidad ante todo: Experiencia de la Fe en la Meditación Cristiana", ambas conferencias de gran profundidad y sabiduría. El lleno fue total y el intercambio al final mostró el entusiasmo por parte de los  asistentes.

El día 17, sostuvo una reunión en la sede de la Conferencia Episcopal con autoridades eclesiásticas quienes mostraron gran interés en la enseñanza y rescate de esta práctica, luego que el P. Laurence expusiera sus orígenes y el trabajo con autoridades de la Iglesia en varios países. 

Esa tarde se inició hasta el día domingo, en la ciudad de Los Teques, con la asistencia de 80 personas, el retiro de fin de semana "Los Ocho Grandes Problemas de la Vida".

Las cuatro charlas se basaron  en la importancia que daban los Padres del Desierto al conocimiento de los estados de la mente: glotoneria, avaricia, lujuria,  tristeza, ira, acedia, vanidad y orgullo, para de esta forma lograr la paz y la moderación. Enfatizó cómo la meditación ayuda a lograr este equilibrio.

Finalizó con un foro de intercambio con preguntas muy interesantes que el P. Laurence respondió de forma amplia, sabia y generosa.

El padre Laurence se despidió muy contento y satisfecho de la acogida, el interés y el cariño recibidos durante su visita.

 

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