5 de junio 2016

Un fragmento de John Main OSB, “The Life Source”, MOMENT OF CHRIST (New York: Continuum, 1998), págs. 76-78


Toda gran tradición espiritual ha sabido que en la quietud profunda el espíritu humano empieza a ser consciente de su propio Origen. En la tradición hindú, por ejemplo, los Upanishads hablan del espíritu que ha creado el universo y que habita en nuestro corazón. El espíritu es descrito como aquel que en silencio está amando a todos. En nuestra propia tradición Cristiana Jesús nos dice que el Espíritu habita en nuestros corazones, y nos habla del Espíritu como Espíritu de amor. El contacto interior con la Fuente de la Vida es vital para nosotros, porque sin el difícilmente podemos empezar a entender el potencial que nuestra vida tiene para nosotros. El potencial es que deberíamos crecer, que deberíamos madurar, que deberíamos llegar a la plenitud de la vida, la plenitud del amor, la plenitud de la sabiduría. El conocimiento de ese potencial es de suprema importancia para cada uno de nosotros. En otras palabras, cada uno de nosotros, a lo que estamos invitados es a empezar a entender el misterio de nuestro propio ser como el misterio mismo de la vida. (…)

Es por eso que la tradición de la meditación es de gran importancia… es una tradición de compromiso espiritual… A través de todas las épocas y sin embargo disponible para ti y para mí. Lo único que es necesario en realidad es que iniciemos la práctica. Tenemos que volvernos disponibles para este trabajo de hacer contacto con la Fuente de toda la vida, tenemos que hacernos espacio en nuestras vidas para la expansión del espíritu. La profundidad de la fe y la práctica de la meditación, ambas son muy sencillas. Tú solo tomas tu palabra… y la repites… Haces contacto con el centro de tu ser, porque el mantra está arraigado en tu corazón, el centro de tu ser, y porque tu ser está arraigado en Dios, el centro de todos los seres.

 

Después de la Medtiación, de Arthur Osborne, RAMANA MARARSHI AN THE RATH OF SELF KNOWLEDGE (York Beach, ME: Samuel Weiser, 1997), págs. 158-159

Sri Bhagvan dijo, “La Gracia del Gurú es como un océano. Si uno llega con una copa obtendrá una copa llena. No tiene caso quejarse de la mezquindad del océano. Mientras más grande sea el vehículo más podrás cargar en él. Depende completamente de ti.“

 

Selección: Carla Cooper

Traducción: Guillermo Lagos