4 de diciembre 2016

Un fragmento de John Main OSB, “The Way of Silence” en The Hunger for Depth and Meaning: Learning Meditation with John Main (Singapur: Medio Media, 2007), pág. 161


Para aprender a meditar, tienes que aprender a estar en silencio, y no tenerle miedo al silencio, (…)

No tenemos que crear el silencio. El silencio está ahí, dentro de ti. Lo que tenemos que hacer es entrar, volvernos silenciosos, para convertirnos en silencio. El reto de la meditación es el darnos permiso de ser lo suficientemente silenciosos para permitir emerger al silencio interior. El silencio es el lenguaje del Espíritu. El lenguaje del espíritu es el amor. Y el propósito de la meditación es estar en presencia del amor, el amor que, como nos dice Jesús elimina todos los miedos.

 

Después de la meditación, un fragmento de “Traditional Irish Blessing” en EARTH PRAYERS: 365 Prayers, Poems, and Invocation from Around the World, ed. por Elizabeth Roberts and Elias Amidon (New York: HarperCollins, 1991), pág. 204

Que la bendición de la luz esté contigo, luz exterior y luz interior. Que la bendición de la luz del sol brille sobre ti y caliente tu corazón hasta que resplandezca como una hoguera, para que algún extraño pueda entrar y calentarse en ella, y también un amigo.

Y que la luz brille a través de tus ojos, como una vela puesta en las dos ventanas de la casa invitando al vagabundo a entrar y protegerse de la tormenta…

 

Selección: Carla Cooper

Traducción: Guillermo Lagos.