5 de febrero 2017

Un fragmanto de John Main OSB, “Christian Community” en The Hunger for Depth and Meaning”, ed. P. Ng (Singapur: Medio Media, 2007), págs. 143-144

 


Hay algo en todos nosotros que nos incita a controlar al otro. El crimen de la idolatría es, precisamente, crear nuestro propio dios, a nuestra propia imagen, y parecido. En lugar de encontrar a Dios en la infranqueable diferencia de Dios con nosotros, construimos un juguete como un modelo a nuestra imagen emocional y psicológica. Cuando hacemos esto, no lastimamos a Dios, ya que la irrealidad no tiene poder sobre la verdad. Sin embargo, si nos denigra y dispersa, sometiendo el potencial y la gloria divina de nuestra humanidad a los falsos brillos y al becerro de oro.

La verdad es mucho más emocionante, mucho más maravillosa…. El camino para experimentar esta verdad es el silencio de nuestra meditación. El poder que tiene el silencio es permitir que surja la verdad, que se levante al servicio, que se haga visible. Sabemos que la verdad es más grande que nosotros, y tal vez encontramos humildad fuera de nosotros que nos lleva al silencio atento. Dejamos a la verdad ser.

Al igual que podemos disminuir a Dios a nuestro propio tamaño e imponerle nuestra propia identidad, también lo podemos hacer con otras personas. En la meditación, desarrollamos la capacidad de voltear nuestro ser completamente hacia el Otro. Aprendimos a dejar que nuestro vecino sea, al igual que aprendemos a dejar a Dios ser. Aprendemos a no manipular a nuestro vecino, sino a reverenciarlo, a reverenciar su importancia, la maravilla de su ser. En otras palabras, aprendemos a amarlo… Debido a esto, la oración es la gran escuela de la comunidad.

 

Después de la meditación: Robert Frost, “A Time to Talk” en POVERTY OF ROBERT FROST (New York: Henry Holt, 1979), citado en The Witer´s Almanac, 1.31.17

Un tiempo para hablar

Cuando un amigo llama desde el camino

Y hace el caminar de su caballo más lento,

No me quedo parado y veo a mi alrededor

En las colinas que no he arado,

Y grito desde donde estoy, ¿Qué es esto?

No, mientras haya tiempo para hablar.

Empujo mi arado en la tierra blanda,

La cuchilla hacia arriba con cinco pies de altura,

Camino lentamente: voy hasta la barda de piedra

Para una visita amigable.

 

Selección: Carla Cooper

Traducción: Guillermo Lagos